Se nota que pertenece a una ARTISTA, así, en mayúsculas.
No sé si me gusta más por lo que es el propio diseño y estructura de la vivienda o por la decoración personal de la misma.
La carencia de puertas en el interior permite que la luz fluya por toda la vivienda a la vez que se disfruta de
las vistas de pilares y vigas en madera en contraste con el blanco impoluto de las paredes. A esta continuidad y luminosidad ayuda el microcemento pulido del suelo que refleja la luz.
Las ventanas de diversos tamaños dan un toque especial y único a la casa, así como el hueco que une visualmente cocina y zona de estar.
El entrevigado del dormitorio quita el sentido...
¿Qué decir de la decoración?
¡¡Pues que adoro el colorido de esas alfombras!!
Todos los espacios se han aprovechado perfectamente con mobiliario de diseño, heredado (por ejemplo, la silla de la cocina y la vajilla eran de su abuela) o recuperado.
Invito a descubrir detalles en cada rincón de este ático en el madrileño barrio de Lavapiés.
¿Se me olvidó decir que este ático también tiene terraza? Vaya....
Fotos vía ElleDeco.
Me ha enamorado esta casa; imaginaba que, por extensión, también el trabajo de la propia Nuria me gustaría y así es, lo comprobé en su página.